RSS

Tranquila, que yo te escucho...

- ¿Sabes? Llevas unos 15 minutos moviendo la cucharilla. Ese café, por no tener, ya no tiene ni cafeína. ¡Eo...! ¿me estás escuchando?
- Eh... sí, perdona, perdona. Estaba en otro sitio. Pero no vayas a pensar que no estaba pendiente de lo que me decías.
- ¡¿A sí...?! ¿y qué te decía?
- Me hablabas del ideal de ... de... ¿del amor?
- ¡Anda, qué...!
- ¿De política?
- ¿Por qué no dejas de inventarte cosas y me prestas un poco de atención? ¿Te aburro?
- No, no... si no es eso. Si no eres tú, soy yo. Últimamente me cuesta un poco concentrarme.
- ¿Concentrarte en qué?
- En todo, en lo que me dicen. ¿Sabes? Oigo una frase y enlazo la última frase con otra. Y esta con otra nueva y así sucesivamente y no puedo parar. Hablando de parar, ¿cuándo coños va a dejar de llover? Perdona que diga tacos, no suelo ser tan mal hablada. Para mal hablada, Laura, hablando con sus amigas. El otro día me contó que no se corta un pelo con sus compañeras y si tienen que hablar de sexo, ahí van y vomitan todos los detalles. ¡Qué poco pudor! ¿no? No sé, en mi casa nunca se hablaron estas cosas. ¡Madre mía! Me acabo de acordar que no he llamado a casa. Mi madre debe de estar de los nervios. Últimamente los tengo abandonados... A mis padres, digo. Me da mucha pena, porque ahora me empiezo a plantear que pasaría si faltasen. La vida es tan corta.... Parece que se pasa más deprisa de forma proporcional a la edad que tienes. Pero yo creo que para mí especialmente y sabes que no tengo tantos años. Me quedan muchas primaveras, lo presiento. Como dice Ismael Serrano, "para morir joven ya soy viejo", pero yo creo tengo fe en que me quedan muchas, muchas primaveras... Hablando de primaveras y música, Regina me dijo que escuchó el disco de Martirio que le pasaste. El de "Primavera en Nueva York". ¡Qué vaya, empieza hablando de amor! ¡¿Cómo no?! ¿Es de lo que me estabas hablando, no?
[···]

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Un mundo de poco oído que nada escucha naufragio...